- Por qué llamar a un ex demasiado pronto puede ser peligroso
- El trabajo previo a una llamada telefónica
- ¿Cómo saber si está preparado para la fase de llamada telefónica?
- Cómo pasar a la fase de llamada telefónica (y qué decir)
Durante los últimos diez años, he pasado gran parte de mi vida profesional estudiando a los ex y, en mi opinión,
No deberías llamar a tu ex hasta que hayas completado una regla de no contacto y hayas creado una base sólida en la fase de mensajes de texto.
No hay literalmente ninguna ventaja en que "llames", salvo compromisos que no puedas eludir (como mascotas, niños, etc.).
Hoy voy a llevarles a través de una odisea en la que voy a exponer los siguientes argumentos,
- Llamar a un ex demasiado pronto puede ser peligroso
- Mostrarle el trabajo previo que hay que hacer antes de llamar por teléfono
- Cómo saber cuándo estás preparado para una llamada telefónica
- Mostrándote lo que considero la parte más importante de una llamada telefónica
Empecemos.
Por qué llamar a un ex demasiado pronto puede ser peligroso
Hay varias razones por las que llamar a tu ex antes de tiempo puede ser perjudicial.
Básicamente, estas razones pueden clasificarse en cuatro factores principales.
- Saltar la escala de valores
- Temas demasiado emotivos
- La conexión ansiedad/evitación
- No obtener control emocional
Saltar la escalera del valor:
Durante la última década, he desarrollado un sistema que cariñosamente llamo la "escalera de valores".
Este sistema funciona según un principio escalonado: tras una ruptura, se inicia la norma de no contacto. Una vez superado este periodo, se aumenta gradualmente la frecuencia y profundidad de las conversaciones, pasando por distintos medios de comunicación.
Cada etapa genera valor y confianza.
Las etapas incluyen:
- Fase sin contacto
- Fase de mensajes de texto
- Fase de llamada telefónica
- Fase de encuentro
Cada etapa de la escala de valor es como un paso lento y deliberado: es el enfoque de la tortuga y la liebre.
Sin embargo, muchos individuos, cuando sienten que están progresando, se saltan pasos, como saltar de la fase de no contacto directamente a un encuentro en persona, lo que a menudo conduce a retrocesos.
Uno de los peligros de ponerse en contacto con su ex demasiado pronto es saltarse etapas esenciales de la escalera.
Tomémonos un momento para hablar de por qué la fase de los mensajes de texto siempre tiene que producirse antes que la fase de la llamada telefónica.
Cambiar la dinámica del texto a la llamada:
Los temas de conversación durante las llamadas telefónicas suelen ser más emotivos.
Al enviar un mensaje de texto a un ex, hay un nivel de distanciamiento; ambas partes tienen tiempo para pensar sus respuestas. No hay necesidad de interpretar el tono o las reacciones cara a cara, lo que hace que el intercambio sea menos personal.
Hay quien lo ve como un inconveniente, pero yo creo que, sobre todo tras una ruptura, es una ventaja, ya que da un respiro a ambas partes.
Las llamadas telefónicas a veces pueden resultar demasiado emotivas
Sin embargo, con las llamadas telefónicas se tiende a hablar de temas emocionalmente cargados, como los motivos de la ruptura, la búsqueda de un cierre o incluso la posibilidad de una reconciliación.
Un peligro adicional de llamar demasiado pronto es la posibilidad de quedarse demasiado tiempo. Las llamadas prolongadas o frecuentes pueden dar lugar a discusiones con una gran carga emocional. Pueden surgir preguntas sobre la causa de la ruptura, la búsqueda de un cierre o incluso la petición de una segunda oportunidad, y esto puede resultar desagradable para su ex.
La conexión ansiedad/evitación
Sabes, una nota interesante es que la mayoría de los ex que estudiamos en Ex-Boyfriend Recovery tienden a tener estilos de apego evitativo.
El principal deseo de alguien con un estilo de apego evitativo es la independencia.
Si les llama y se sumerge en un tema emocionalmente cargado antes de tiempo, podrían verlo como una amenaza a su independencia, lo que les alejaría aún más.
Esto me lleva a otro punto importante. Como se ha mencionado, muchos de los ex de nuestros clientes tienen un estilo de apego evitativo, mientras que una parte significativa de nuestros clientes se inclina hacia un estilo de apego ansioso.
Donde esto resulta especialmente pertinente durante la fase de la llamada telefónica es en la creencia subyacente:
Que los evitadores a menudo asumen que los individuos ansiosos los quieren de vuelta.
Tras la ruptura, las personas con un estilo de apego ansioso suelen intentar abordar y resolver los problemas. Pueden suplicar a su ex que vuelva, prometer que las cosas cambiarán, etcétera.
Tales comportamientos conforman la percepción que el evitador tiene de las intenciones del individuo ansioso. Por lo tanto, cuando surgen temas cargados de emoción durante una llamada telefónica, pueden confirmarse inadvertidamente las suposiciones del evitador:
"Ah, sí que me quieren de vuelta. Tal y como pensaba".
Falta de control emocional
Además, precipitarse en la fase de la llamada telefónica puede indicar una falta de control emocional. Este concepto es fundamental para nuestras enseñanzas en Ex-Boyfriend Recovery. La esencia de la escala de valores es la progresión sin prisas, manteniendo el equilibrio emocional mientras se avanza de manera constante.
Dicho esto, antes de entablar una conversación telefónica con su ex, es esencial seguir algunos pasos preparatorios.
La primera de ellas es la aplicación de una norma de no contacto.
El trabajo previo a una llamada telefónica
Reconozco que esto puede sonar como un consejo familiar para cualquiera que haya investigado el panorama post-ruptura, pero considera esta perspectiva:
La regla del no contacto no es sólo una cuestión de control emocional; también es un camino para superar a tu ex.
Esta idea surgió de forma prominente cuando entrevistamos a nuestros casos de éxito.
Muchos compartieron reflexiones como,
"Es extraño, pero sentí que no hice nada extraordinario. Sólo me centré en mí mismo durante el periodo de no contacto. Al final, sentí que había superado a mi ex, y eso, creo, fue fundamental para mi éxito".
Hay pruebas científicas que apoyan esta idea.
Como ya se ha mencionado, muchos de los ex que estudiamos muestran estilos de apego evitativo despectivo.
Un rasgo peculiar de los evitadores despectivos es que a menudo no empiezan a echar de menos a sus ex hasta que están convencidos de que sus ex les han dejado atrás.
Hablo mucho de ese concepto en este vídeo,
La regla del no contacto, cuando se emplea correctamente, proyecta una imagen de superación, lo que en realidad puede debilitar las defensas de la persona que evita y aumentar su receptividad hacia ti.
Por lo tanto, la regla del no contacto no sólo es fundamental, sino que también sienta las bases para la escala de valores de la que he hablado antes.
Es crucial recordar la secuencia: a la fase de no contacto le sigue la fase de envío de mensajes de texto, que puede ser todo un reto.
El objetivo es reconstruir una conexión y unos cimientos.
Un escollo importante que he observado es que las personas se saltan etapas de la escala de valores.
Mi aspiración para todos los clientes es que, cuando pasen a las fases de llamada telefónica o reunión, hayan establecido una base sólida a través de los mensajes de texto.
Esta base garantiza que las interacciones posteriores sean fructíferas.
Piénsalo de este modo: no propondrías matrimonio en la primera cita. Construir una relación requiere tiempo, esfuerzo, atracción, compenetración e intercambios significativos.
Se trata de apilar metódicamente las probabilidades a tu favor, asegurándote de que cada paso está bien fundamentado antes de pasar al siguiente.
Todos estos elementos son fundamentales y entran en juego durante la fase de los mensajes de texto, en la que te reencontrarás con tu ex.
La regla 7/38/55 en la escala de valores
Otra faceta intrigante de la escala de valores es cómo se alinea con la regla 7/38/55.
Albert Mehrabian introdujo esta regla en su libro de 1971 "Mensajes silenciosos".
Según él, la comunicación comprende un 7% de palabras habladas, un 38% de tono de voz y un 55% de lenguaje corporal.
Lo fascinante de la escala de valores es su alineación con la regla 7/38/55.
Si se evalúa la escalera en el contexto de esta regla, se observará una adherencia casi perfecta en sus distintas fases.
- Por ejemplo, la fase de los mensajes de texto representa principalmente el 7% de la comunicación basada en palabras, lo que podría explicar por qué pocas personas se reconcilian con sus ex durante esta fase.
- La fase de llamada telefónica supone un 38% adicional, incorporando el tono.
- La fase de encuentro añade además un 55%, captando el lenguaje corporal.
El objetivo general de la escala de valores es ascender progresivamente hasta alcanzar la totalidad de la comunicación, es decir, el 100% de su significado.
Sin embargo, la transición de la fase de mensajes de texto a la de llamadas telefónicas representa un salto significativo.
De repente, tu ex oye tu voz, y las interacciones pueden progresar rápidamente. Esto subraya la necesidad de establecer una base sólida a través de la escala de valores.
Sin embargo, surge una duda habitual: "Si actualmente estoy en la fase de los mensajes de texto y comprendo su importancia, ¿cómo puedo discernir cuándo estoy preparado para la fase de la llamada telefónica?".
¿Cómo saber si está preparado para la fase de llamada telefónica?
Me gustaría compartir una captura de pantalla de nuestra comunidad, de hace unos años, que ofrece algunas ideas al respecto.
Esta persona dijo,
¿Cómo sabe cuándo ha acumulado suficiente valor para ascender en la cadena?
81 días post BU:
En la fase de llamada telefónica. Ya hemos hablado 4-5 veces.
1ª llamada - me llamó un nombre cariñoso 3 veces
2ª llamada: me felicitó por mi pelo, dijo que estaba orgulloso de mis hijos, que se alegraba de que me fuera bien y que me echaba de menos.
3ª llamada - nombres cariñosos por todas partes
4ª llamada - eligió hablar conmigo en lugar de hacer la prueba de sonido...
5ª llamada - más tarde que por la noche después de su show. Esta llamada telefónica se convirtió en una llamada FaceTime. Él dijo que me veía hermosa (yo acababa de llegar de un partido de fútbol) Él estaba con amigos & familia, y le dijo a alguien que estaba en el teléfono conmigo y le dijo a esa persona "te acuerdas de (anónimo) ¿verdad? Mi novia.....ex-novia......novia?"
¿Estoy avanzando demasiado rápido?
Así pues, esta persona se plantea si ha cultivado suficiente valor para pasar a la fase de reunión.
¿Mi punto de vista?
Por supuesto.
Un indicador crucial que hay que vigilar es lograr un ratio de comunicación equilibrado.
Lo ideal es que el intercambio de mensajes sea 1:1: por cada mensaje que envíes, ellos deben enviar uno a cambio.
- Si te encuentras enviando dos mensajes de texto por cada uno que te envían, eso no es favorable.
- Por el contrario, si envían dos mensajes en respuesta a uno tuyo, es una señal prometedora.
Además, presta atención a los matices, como hizo esta persona.
La reintroducción de apelativos cariñosos, la frecuencia de las conversaciones (de cuatro a cinco veces) y el paso a la fase de llamada telefónica son indicadores positivos. Las menciones que oscilan entre "novia" y "ex novia" también aportan información valiosa.
Esencialmente, si observas estos patrones durante la fase de envío de mensajes de texto, en contraposición a la fase de llamada telefónica, es un fuerte indicio de que estás bien preparado para la llamada telefónica.
Cómo pasar a la fase de llamada telefónica (y qué decir)
A muchas personas les cuesta pasar de la fase de los mensajes de texto a la de las llamadas telefónicas.
Para navegar por esto, recomiendo emplear lo que yo llamo el "texto de transición de llamada telefónica".
Esto es lo esencial:
- Involucra a tu ex por SMS
- Asegúrese de que la conversación fluye sin problemas
- Empieza a narrar una historia intrigante.
- La historia debe cautivar su atención y ser demasiado larga para resumirla en un solo texto.
- A mitad de camino, haz una pausa y escribe: "¿Sabes qué? Te llamaré para terminar esto. Es demasiado para escribirlo a máquina".
Su curiosidad les impulsará a responder a la llamada para escuchar la conclusión.
El objetivo es pasar ingeniosamente de los mensajes de texto a las llamadas.
Sin embargo, no despliegue esta táctica a menos que esté seguro de que tiene las de ganar: cuando utilicen apodos cariñosos, mantengan conversaciones regulares, garanticen una frecuencia de comunicación equilibrada y respondan con rapidez.
Si estos elementos coinciden, merece la pena intentar el texto de transición de la llamada telefónica.
A continuación, me gustaría destacar lo que considero el eje de las llamadas telefónicas eficaces: el concepto de flujo de conversación.
Cada conversación, ya sea por texto, teléfono o cara a cara, tiene su propio ritmo.
Aceptar la idea de que cada conversación tiene su propia fluidez permite aprovechar el poder del efecto Zeigarnik.
Este fenómeno psicológico postula que las personas recuerdan más vívidamente las tareas inacabadas que las que han completado.
Así, es más probable que tu ex recuerde una conversación que cortaste en su punto álgido que una que se alargó. ¿La estrategia? Implícales a fondo, identifica el cenit de la conversación y termínala ahí.
¿Cómo se determina el clímax?
Por regla general, cuando estás más absorto y deseas que la charla no termine nunca, es probable que ése sea el punto álgido. Concluir una conversación no tiene por qué ser intrincado ni grosero.
Puede que surja una crisis laboral imprevista, que tu teléfono "se apague inesperadamente" (cuando simplemente podrías haberlo apagado) o que estés a punto de participar en una actividad emocionante.
La clave está en reconocer el punto álgido de la conversación y salir con elegancia.
La potencia de esta estrategia eclipsa el contenido de tus palabras. Recuerda que lo que realmente resuena no es tanto quién inicia una conversación como quién la concluye.